Una vez descubierto, el árbol quiso ocultar la verdad, pero cómo..., el secreto había salido a la luz, ¡y de qué forma! Todos lo vieron.
Inmediatamente, el culpable fue rodeado por guardas del bosque, y lo apresaron, llevándolo a juicio ante el "Rey del Bosque".
Todos presenciaron la sentencia. Securis estaba más que decepcionado. Prestaba atención y callaba.
Determinaron pues quitarle la vida a este árbol y echarlo al fuego, pues había trangredido la ley impuesta. Dos lágrimas corrieron por los ojos de Securis pero comprendió que todo era hecho por la seguridad del bosque.
Así terminó entonces este árbol, condenado al fuego. A los demás no se les cohibió su libertad pero tuvieron ejemplo de lo que les podría ocurrir en caso de rebelión.
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